Pesadilla

Ayer tuve un suenho. Bueno, en realidad tuve una pesadilla. Sonhe que Fidel Castro le decia a Raul que se habia arrepentido de no ser el presidente de la Republica de Cuba, y que por tanto, habia decidido regresar a su puesto previo. Raul se habia quedado muy asombrado al haber sido tronado por su propio hermano, y bueno, despues de eso la verdad que no recuerdo mucho. Es increible esto de los suenhos. Son completamente caoticos, porque no es que estuviese yo pensando muy intensamente en los hermanos Castro ni nada por el estilo. Despues de todo, el intercambio de puesto de los dictadores (como si Cuba fuese una monarquia) no ha llevado a ningun cambio tangible en la vida diaria de los habitantes de la Isla. Esto no hay que vivirlo para imaginarlo, pues al leer el Granma, veo las familiares charlatanerias.

Cuando estaba becada en la Lenin, recuerdo que en el ultimo anho nos forzaron a ver el Noticiero diariamente antes de empezar el autoestudio. Esto con la excusa de que la juventud cubana no estaba informada lo suficiente sobre los sucesos nacionales e internacionales. Confieso, que como joven aplicada, y tambien porque sabia que me iria pronto del pais y no me queria buscar problemas, pues iba diariamente a "ver el noticiero" por inercia. Recuerdo que lejos de Noticiero, esos 30 minutos despues de la Calabacita no eran mas que inflados reportes en los que se destacaban los logros cubanos y venezolanos, y se pintaba el mundo exterior capitalista diabolicamente. Lo cierto es que yo me tapaba los oidos de manera simbolica, en parte porque no me interesaba demasiado la politica, y en otra porque lo que decian los locutores y periodistas no era mas interesante que el chisme que me estaba contando fulanita.

Hoy mi perspectiva ha cambiado mucho. Se lo debo en parte a la madurez que han traido los diez anhos transcurridos, y bueno, tambien al hecho que tengo acceso a diversos medios para poder formarme una opinion personal. Pero como ya he dicho, ni siquiera aqui puedo deshacerme del todo de esa neblina que pretendia rodearme completamente durante mis anhos de adolescencia. Ese Granma Internacional siempre esta ahi, con la misma retorica zocata y las mismas frases recicladas que pretenden nacer del pueblo.

Entonces, tratando de darle una de esas interpretaciones baratas a mi pesadilla, me digo que en ella se refleja mi vida, este cambio que en vez de hacerme ver la luz me ha dejado estancada en el mismo sitio, cuando trato de no escuchar el argumento opuesto. Que he cambiado solo en nombre, como cambiaron de poder los hermanos, pero que otra cosa en mi necesita algo nuevo. Pero no le creo a esta monstruosa interpretacion. Al menos no cuando de vez en cuando, aun a reganadientas, ademas de leer el New York Times y el Washington Post, de paso escaneo el Granma Internacional. El pecado de cerrar los ojos, o no querer pensar, lo veo como el peor de todos. Ese definitivamente ha sido un cambio para bien.